Proclama se define en la primera acepción del Diccionario de
la Real Academia Española como una notificación pública; en la época virreinal
las proclamas también se hacían mediante monedas o, mejor dicho, las grandes
noticias (la noticia de la ascensión al trono de un monarca, por ejemplo) se
acompañaba con la acuñación de monedas conmemorativas llamadas proclamas.
Estas monedas podían tener un cospel propio (cospel.- disco
de metal dispuesto para recibir la acuñación en la fabricación de las monedas)
o un cospel correspondiente a las de la moneda corriente o en uso (en plata de 8, 4, 2,1 o ½ reales).
También se hacían en cobre y bronce.
En la historia de la proclamas virreinales o novohispanas hay
dos periodos definidos por el método de fabricación y la calidad de las
monedas. Las medallas de Felipe V, Luis I y Fernando VI (de 1700 a 1759) se
hacían a la cera perdida. A partir del reinado de Carlos III (1759) se cuenta
ya con modernas maquinas troqueladoras.
Las proclamas eran repartidas para celebrar los grandes acontecimientos
del reino “se obsequiaban a la población acomodada y pudiente de la Nueva
España, aunque también se hacían llegar a toda la población como obsequios, en
grandes eventos se lanzaban a la muchedumbre con el fin de que conocieran a su
monarca o las novedades de artes, cultura, entre otros.” (https://eldatonumismatico.wordpress.com/las-proclamas-en-el-mexico-colonial/)
Todo lo anterior sirve para mostrar la proclama acuñada en
San Mateo Huichapan en 1809 para celebrar la coronación de Fernando VII (acaecida
en 1808). La proclamación fue hecha por Don Antonio de Chávez Nava.
*Agradezco la imágenes a Javier Lara Bayón
1 comentario:
hermosa proclama, en el Estado de Hidalgo Huichapan es de los pocos lugares que tiene proclamas, tambien las hay de Actopan, si alguien tiene alguna y desea venderla me interesa. rpar1982@hotmail.com
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